viernes, 25 de julio de 2008

Lagrimal

Explotaré este lagrimal hasta la sangre y el vino, 
hasta el vientre. 
Explotaré este lagrimal hasta que arda o muera, 
o arañe el cuero las excusas, 
y que todo el dolorido azul se destiña. 
Explotaré este lagrimal hasta que corra por el rostro 
savia tibia de nuevas.

Una bandada está saliendo de mi cuerpo y va hacia otra parte.
Algo espera en el fondo del esqueleto;
un obtuso paréntesis
que deja pendiente el incendio o la tormenta.
Algo queda ahí abajo
obscenamente mudo
esperando ser re-escrito.
Soplo sobre el andén las huellas malditas 
Espero, mientras las verdades se despeinan. 

Anida en mi vientre una semilla mutilada. 
Nada nacerá de mi tumba entreabierta. 

Espero que pase el aire, por mis tubos anochecidos.
Hace frío en la nuca, 
amanece nublada la boca, 
patina sobre una alfombra clonica un alma de tinta y fiebre. 

Lentamente se va lejos 
cubierta de polvo y nubes, 
poco importa. 

Se va. 
 Se eleva.
Pentagrama poblado de bocas y mares.
Paréntesis de oferta,
que se regala al mundo.
Atajo de espejos y una curva curda
que se dilata como las pupilas de el que espía.
Papelito huérfano
que dejé en el bolsillo de tu abrigo,
esperando ser poesía.